La vida es un carnaval de máscaras... Cuál es tu favorita?

                           ¨Lo que niegas te somete, lo que aceptas te transforma¨

                                                                                    -Carl Jung

 Las máscaras forman parte de nuestras vidas, las usamos frecuentemente, nos ayudan a interpretar personajes o roles auto-impuestos, con ellas logramos proyectar una imagen determinada que en algunos casos, no tienen mucho que ver con lo que en realidad somos.

Unos de los primeros en hablar de máscaras fue Carl Jung, un médico psiquiatra, psicólogo y ensayista suizo, fundador de la escuela de psicología analítica. Según Jung, las personas están formadas por tres elementos:

a)    Innato.

b)    Lo que la sociedad espera de él y él lo sabe

c)    Lo que cada uno desea ser por una parte y lo que quiere mostrar a los demás.

Ahora bien, sabemos que para formar parte de los distintos grupos sociales que conforman  la sociedad usamos las máscaras y eso es normal y a veces necesario. El problema surge cuando nos aferramos a ellas y no aceptamos nuestro yo innato ocultándolo  de tal forma que  llegamos a perder nuestra identidad. Esto trae como consecuencia la enfermedad.

Existen muchas máscaras y podemos usar varias a la vez, lo importante es saber a qué grupo pertenecen las que usamos frecuentemente:

Mascaras Sanas, ellas nos ayudan a representar los diferentes roles a lo largo de la vida, son flexibles por lo que se adaptan a los cambios; mientras las usamos mantenemos el equilibrio entre lo que somos y queremos y lo que queremos conseguir con ellas. (Ser-Hacer-Tener).

Mascaras engañosas, como su nombre lo dice, con ellas engañamos a los demás, bien sea para no entrar en problemas o solo para conseguir un objetivo, no obstante se tenga que jugar un rol con el que no nos identificamos, de esta forma encubrimos la hipocresía y la falsedad.

Mascaras patológicas, son rígidas, la persona se ha acostumbrado tanto que no logra desprenderse de ellas y las utiliza constantemente, olvidando quien es en realidad, lo que conlleva a mucho desgaste emocional, creando insatisfacción e inseguridad. En estos casos es necesaria la ayuda profesional.

Mientras mejor nos conozcamos y estemos en sintonía con nuestra esencia buscando el equilibrio de cuerpo, mente y espíritu, mejor será nuestra interacción con nosotros mismos y nuestro entorno, y menor la necesidad de depender de las máscaras.